Pero no tengo miedo...

Mis rodillas en el piso,

con las piernas abiertas,

el torso erguido y mis manos,

recorriendo la entrepierna...

Esperando por vos Señor,

mis pezones se erectan,

mi respiración se entrecorta,

con mi mente en alerta...

Está totalmente oscuro,

en esta pieza desierta,

me condenaste a no verte,

por mis impertinencias...

Pero no tengo miedo,

confío en tu nobleza,

sé que estás conmigo,

a pesar de tu tristeza...

No debes temer por mí,

comprendo tus problemas,

sé que sabrás resolverlos,

creo en tu omnipotencia...

Mis rodillas en el piso,

con las piernas abiertas,

mi encendida vagina eyacula,

licor con sabor a fresas...

Esperando por vos Señor,

mis pezones se erectan,

se convulsionan mis músculos,

mientras mi corazón reza...

ålgåmå®înå

agosto de 2006